Justiciero, suele provocar a la suerte, quema el calor en la calle y se derrite todo, en su cara aún se ve la sangre.
La caricia del metal no es algo que le sorprenda, menos cuando esta
caricia se la da una bala; tiene un buen doctor y un mejor vendedor de
repuestos.
Esta zona es muy congestionada no creo que el pueda monitorear